Resumen
Al iniciar el estudio del Derecho del Procedimiento Penal, lo caracterizamos como el verdadero complemento del Derecho Penal, porque lo actualiza a través de una dinámica especial, y en ello, la prueba penal es lo más trascendente. Por esta razón, no es exagerado afirmar que el Derecho Penal (partes general y especial), para la realización de su objeto y fines, está condicionado en todo a la prueba: de otro modo, no pasaría de ser un conocimiento teórico sin ninguna relevancia práctica.
La prueba es el factor básico sobre el que gravita todo el procedimiento1; de aquélla dependerá el nacimiento del proceso, su desenvolvimiento y la realización de su último fin. Si quienes deben determinar la situación jurídica del probable autor de una conducta o hecho ilícito no se sustentaran en ella para fundar sus determinaciones, éstas carecerían de la fuerza necesaria para su justificación particular y general.
Por las razones expuestas, el estudio de la prueba es obligado; con ese objeto, fijaremos la atención en un conjunto de principios doctrinarios y jurídicos, relacionados con la esencia, operancia, objeto y fines que justifican su existencia en el Derecho de Procedimiento Penal por ende, abarcará las cuestiones siguientes: etimología y concepto, antecedentes históricos, los actos de prueba y su ubicación en la sistemática del Derecho del Procedimiento Penal, sus principios rectores, los elementos de la prueba, sus fines y resultados, los sistemas de apreciación de la prueba, la problemática sobre la llamada “carga de la prueba”, la clasificación y estudio, en particular, de los medios de prueba establecidos en la legislación colombiana.